Te propongo que empieces con una práctica sencilla de observación. Observa cada estancia de tu vivienda, sin hacer juicios, de este modo estarás abriendo tu mente y será más fácil hacer los cambios.
En el “blog” compartiré artículos que te ayudará a entender un poco más esta ciencia milenaria, siempre desde una visión sencilla. Y si quieres avanzar más o necesitas un cambio más personalizado, ponte en contacto conmigo, junt@s diseñaremos un plan adaptado a tí.